En la vida hay dos cosas inexorables: la muerte y los impuestos, decía Benjamín Franklin. Pues bien, un hecho constatado es que la presión fiscal ha aumentado considerablemente en España en los últimos años.
La presión fiscal suele definirse como el conjunto de los impuestos y cotizaciones sociales recaudados durante un año, expresados como proporción del PIB del mismo año.
Estos últimos años han sido duros para la economía y sociedad española y de alta presión fiscal. La presión fiscal sobre las empresas en España supera hasta en casi cuatro puntos a la media de la Unión Europea (UE). Según los datos de PIB y recaudación para 2021, recientemente publicados, la presión fiscal empresarial en 2021 aumenta hasta el 12% del PIB.
Las normas que regulan los impuestos son altamente complejas. No solamente se trata de normas muy extensas y técnicas, sino que sufren cambios sustanciales con elevada frecuencia. El creciente peso de las Comunidades Autónomas en el ámbito tributario. La actividad regulatoria de las Comunidades Autónomas en materia tributaria se ha multiplicado en los últimos años a medida que éstas han ido ejerciendo mayores competencias normativas.
Esta evolución de los hechos creemos que conduce inexorablemente a dar una mayor importancia a la gestión fiscal en la empresa, integrándola al resto de funciones de dirección básicas tales como la financiera, administrativa, comercial y de producción.
El verdadero ahorro fiscal sólo puede conseguirse, a nuestro juicio, aprovechando al máximo las posibilidades que ofrece la legislación vigente y planificando fiscalmente
De la misma manera que la empresa hace cada año unos presupuestos de gestión y obtiene unos balances y cuentas de explotación previsionales, también es necesario, en nuestra opinión, hacer unos presupuestos fiscales, una cuenta de explotación fiscal previsional y una declaración del Impuesto sobre Sociedades y del IRPF también previsional.
Las funciones de un buen asesor fiscal
La labor de un buen asesor fiscal es asesorar a sus clientes y a la vez enseñarles a aplicar una buena planificación fiscal.
No podemos olvidar que las actividades diarias en una empresa siempre suelen tener implicaciones fiscales, luego aplicar una buena labor preventiva en el tratamiento de los Impuestos Directos e Indirectos puede reducir o evitar la carga impositiva, e incluso eliminar riesgos por aplicación inadecuada o incorrecta de la normativa vigente. Esa es la función de un buen asesor fiscal, además una empresa se enfrenta en su día a día a diferentes opciones, que bien elegidas pueden reportar indudables beneficios para la empresa. Por ese motivo un asesor fiscal debe prestar especial atención a los principales parámetros de optimización fiscal, que son consecuencia de una minuciosa planificación con fines a obtener la menor carga tributaria posible.
Estamos convencidos de que hoy en día, para el empresario, la etapa de desconocimiento con detalle de cuál es la situación fiscal de la empresa ha pasado ya a la historia.
En nuestra continua relación con el mundo empresarial hemos llegado a la conclusión de que la mayoría de los empresarios comparten también este convencimiento. Llegados a este punto, nos podemos formular cinco preguntas que, con carácter general, todos los empresarios y directivos deberían plantearse;
- ¿Se efectúan las declaraciones de acuerdo con la normativa vigente?
- ¿El conjunto de las declaraciones-liquidaciones que presenta una misma empresa son coherentes entre sí? ¿Y con los libros de contabilidad?
- ¿La empresa cumple con los requisitos formales y registrales en lo que respecta a la facturación y llevanza de los libros?
- ¿Qué riesgos implica el incumplimiento de la normativa legal vigente, ya sea con el propósito deliberado de defraudar o por desconocimiento de dicha normativa?
- ¿Cómo puede prepararse la empresa para afrontar con éxito, seguridad y tranquilidad una posible inspección fiscal?
Dar respuesta a las cinco preguntas que hemos formulado no es, sin embargo, empresa fácil y menos para aquellas personas no familiarizadas en profundidad con la problemática fiscal, por ese motivo es tan importante trabajar y contar con un buen asesor fiscal